Juan Santander Leal es un poeta copiapino, radicado en Santiago. Ha recibido el Premio Mejores Obras Literarias. Es autor de los libros de poesía: “Cuarzo”, “Agujas”, “Allí Estás”, “La Destrucción del Mundo Interior”, “Hijos Únicos” y “Nueve Lugares”. En el 2019 fue parte del jurado en el “Tercer Concurso de Cuento y Poesía”, organizado por Bibliometro. Los invitamos a conocer más sobre Juan y su poesía que nos habla de nostalgia y memoria a través de un lenguaje cotiadino y cargado de imágenes que nos sugieren múltiples interpretaciones.
“Pienso que la fase inicial de escritura puede nacer de algo espontáneo, que uno no entiende muy bien, como si la escritura fuera leyéndolo a uno.”
Juan Santander Leal
¿Cómo fue trabajar Hijos únicos con Ediciones Overol?
Fue un proceso intenso y gratificante, de intercambio de ideas sobre los textos y también sobre el aspecto físico del libro. Los editores Daniela Escobar y Andrés Florit trabajaron mucho para que el libro fuera un objeto orgánico, considerando los poemas y la materialidad del volumen. Mario Verdugo también participó en el proceso de edición, como colaborador de la editorial. Tuvimos la suerte de que Santiago Salvador Ascui nos permitiera utilizar una de sus pinturas como portada. La verdad, fue una experiencia enriquecedora, junto a un equipo de trabajo serio y a la vez apasionado.
Libro “Hijos Únicos”
Enseñanzas
La primera vez que armé un plan
para irme de la casa, tenía todo listo:
dónde vivir, con quién. Ahora busco
la libreta donde puse todo eso.
Los ídolos musicales que murieron
jóvenes no dejan de tener algo
de razón. Ni la lengua, ni los dientes
de los que les robamos sus canciones.
Un día en la escuela me enseñaron
a teñir un clavel con anilina,
la profesora nos dio como tarea
escribirle un poema a esa flor.
Un poema es una trampa bien hecha,
un parque de árboles anémicos
visitado a lo largo de los años,
clara y yema de huevo que no existe.
¿De qué manera surgen tus textos, de forma espontánea o trabajas en torno a una idea inicial?
Depende del libro. Pienso que la fase inicial de escritura puede nacer de algo espontáneo, que uno no entiende muy bien, como si la escritura fuera leyéndolo a uno. También he trabajado en torno a una idea inicial, sin embargo esta cambia a lo largo del proceso. Siempre se van agregando inquietudes formales y temáticas a lo que uno pensó desde un comienzo.
¿Qué importancia tiene para ti el ser lector y cómo influye en tu escritura?
Mucha importancia. Últimamente he estado dedicado a la lectura de ensayos sobre la imaginación y otros temas afines y siempre descubro algo que puede animar la escritura. Trato de macerar las ideas, no pasar directamente de lo leído a la escritura. Me parece que la escritura poética tiende a ser más una preparación en una cocina que el mero diálogo entre lo leído y lo que se busca escribir.
Bukowski tiene un poema titulado “El incendio de un sueño” en agradecimiento a una biblioteca de los Ángeles que se quemó en sus años de iniciación, ¿qué relación tienes con las bibliotecas?
En los últimos años no he visitado muchas bibliotecas, prefiero trabajar en casa. Pero durante mi periodo de estudiante universitario y antes, cuando vivía en Copiapó, frecuentaba mucho distintas bibliotecas. Son espacios necesarios, comunitarios y donde acedes a libros y contenidos en general, marca a lectores de todas las edades. Tener la posibilidad de escoger un libro de determinado autor o época que desconocemos o de enfrentarse con un amplio número de volúmenes es un desafío y un placer para quienes gustan de la lectura. Mi aproximación a la poesía chilena, -por ejemplo, la primera vez que vi un libro de Jorge Teillier o “La nueva novela” de Juan Luis Martínez, se produjo en la Biblioteca Regional de Atacama, espacio que aún recuerdo con estima.
El año 2019 Bibliometro lanza su Tercer concurso de Cuento y Poesía, donde fuiste parte del jurado ¿qué piensas de esta clase de iniciativas?
Me parece que son instancias necesarias, que sirven de aliciente para autores y también para lectores. En el rol de jurado siento la responsabilidad de proponer trabajos innovadores y escritos con esmero. Es importante dar relevancia a obras a través de premios, concursos, ediciones colectivas, etc.
“Cuarzo”
Cuando llega el otoño
me detengo a mirar
a través de la jaqueca.
Hay pestañas en la taza
y nudos que la sal deshace. El gato quiere lamer
las cáscaras del techo.
El aire de la madrugada cubre los dormitorios
con su gasa interminable.
Si durmiera un poco menos, no podría entrar en la vigilia.
¿Qué autores nacionales como extranjeros han influido en tu trabajo?
Depende del libro que haya trabajado. El proceso de influencia me parece bastante complejo. No creo que uno lea e inmediatamente se vea influido por un autor. No es algo automático. Prefiero pensar que uno simplemente lee ciertos autores en un momento determinado y sus obsesiones, aspectos estilísticos, tono o disposición, pueden permear la escritura propia. Para lo que he escrito en el último tiempo, mencionaría como lecturas importantes a Ennio Moltedo, Susana Thénon, Patrick Harpur, Elizabeth Hardwick y Joseph Campbell.
¿Se vio afectada tu poesía por el estallido social?
Sí claro, pero de diferentes formas. Registré lo que pude en los primeros días del estallido y luego me costó cada vez más, dada la amplitud e importancia del fenómeno. Se vivieron y se vieron situaciones inaceptables y dolorosas por un lado y esperanzadoras por otro. La necesidad de cambios estructurales en Chile es algo anterior al 2019 y es una tarea permanente como sociedad. Lo vivido el año pasado y lo que estamos viviendo este año no dejarán indiferente a nadie y creo que influirá en lo que escriba en esta época.
¿Qué libros, música o que películas recomendarías para estos tiempos de encierro?
De música recomendaría escuchar música chilena actual, hay muy buenas cosas apareciendo, aún en contexto de pandemia. De libros, alguna biografía interesante que siempre quisimos leer, o alguna novela larga que nunca tuvimos tiempo para terminar. En cuanto a películas, recomendaría ver lo que sea de la gran directora Agnès Varda.
¿Algún proyecto escritural del que nos quieras comentar?
A comienzos de 2020 publicamos junto al músico Enrique Elgueta (Maifersoni) un álbum de poesía y música llamado “Que ningún sentimiento amanezca en su casa”, a través de Sello Fisura y disponible en You Tube y plataformas de streaming. Es una experiencia que me gustó mucho realizar, al llevar los textos a otro formato y trabajar en simbiosis con un músico cuyo trabajo sigo hace tiempo. Los textos utilizados para este trabajo son la base de un libro próximo a aparecer, llamado “Sed y sal” y que será publicado por ediciones Overol.
Muchas gracias, Juan.
Pueden escuchar el proyecto poético-musical de Juan Santander y Enrique Elgueta “Que ningún sentimiento amanezca en su casa” en el siguiente link:
https://www.youtube.com/watch?v=GvMuakdkRIs&t=155s